¡Reconocimiento a Mr. Diego Sánchez!

¡Esta semana te presentamos a Mr. Diego Sánchez, Music & Strings Teacher y orgullosamente Talento Brillamont! Nos juntamos con él para conocer más sobre su trayectoria, sus pasiones, y su persona; ¡te compartimos lo que nos respondió!

“¡Hola! 😀 Soy originario de Monterrey, Nuevo León. Nací el 23 de agosto de 1995. Mis papás son maestros de música. Mi mamá es maestra de violín y mi papá de corno francés. Tengo 2 hermanas, una mayor y una menor, y todos nosotros tocamos al menos un instrumento musical. Andrea, mi hermana mayor es arquitecta, y Lucía, mi hermana menor, es chef. Así que nos dedicamos al arte (cada quien a su manera).

Tengo bastantes hobbies, jajaja. Entre ellos, el senderismo/campismo, danza de hip-hop, actuación, y ensayar música en (casi) todos los géneros musicales. Me gusta explorar exposiciones de pintura, escultura, fotografía, cine y series documentales. Me gusta el deporte aunque no soy muy bueno, y lo practico casi a diario.

Empecé desde mis 22 años en la enseñanza, de hecho Brillamont es la primera organización en la que he trabajado formal y profesionalmente. He estado en la enseñanza musical en el área de cuerdas (violín, viola cello) desde entonces en todos los grados (desde 1° hasta 9°) y este último año he tenido la excelente oportunidad de ser maestro titular de 4D. Entonces mi alumnado ronda entre 250 a 300 alumnos. 

Lo que más me gusta de pertenecer a un colegio como Brillamont es el impulso de querer crecer, el apoyo y dedicación de los directores hacia los maestros/personal administrativo. La cultura dentro de nuestro equipo de trabajo ha ido creciendo y mejorando poco a poco, de hecho hay muchísimas cosas de las cuales estoy orgulloso de trabajar en Brillamont.

Tengo 4 años en el colegio; en octubre de este año cumplo 5 años aquí. Lo he disfrutado bastante, tanto que ni me he percatado que ya casi llevo 5 años.

Estudié Educación y Desarrollo de manera Online. Cuando empecé la carrera estaba en otra ciudad, por eso escogí esta modalidad. También sigo trabajando como músico profesional fuera del colegio tanto como violinista como guitarrista o bajista, y participo en eventos sociales y culturales.

Mi pasión la descubrí y aprendí de mis papás. Como mis dos papás son maestros de música, desde los 5 años empecé con clases de violín. Después mi papá me impulsó a tener un segundo instrumento y estuve con varios, desde flauta traversa, saxofón, guitarra española, hasta bajo eléctrico.

Como maestro, mis actividades favoritas en Brillamont son aquellas que requieren de nuevas formas de enseñanza, salir del salón, diferente razonamiento, trabajo en equipo, habilidades interdisciplinarias (en especial si combino todas las últimas en una actividad/proyecto) porque obliga a los alumnos (y a mí) a salir de la zona de confort. 

Normalmente están disfrazados como juegos y el objetivo de enseñanza se utiliza durante toda la actividad. De ahí, se  impulsa a quebrar con la rutina, crear nuevos lazos, divertirse aprendiendo y un sin fin de experiencias hermosas que tengo en el colegio.

Llegué a Brillamont por mi hermana mayor, Andrea, quien estuvo en el puesto de maestra de cuerdas. En octubre de 2017, mi hermana me pregunta si estoy interesado en un puesto de maestro de música en un colegio privado y a la semana me hablan sobre una entrevista de trabajo y desde entonces he estado en esta institución.

Lo que más me gusta de Brillamont es su gente, creo que es lo más fuerte de la escuela. Hay un recibimiento desde la entrada al lugar hasta el momento que sales. Hay un apoyo de los coordinadores, agradecimiento de los padres de familia, atención de los alumnos, trabajo efectivo con los otros profesores si hay dudas con procedimientos, se te da la mayor atención posible.

En fin, esas actitudes que demuestra cada uno de nosotros, día tras día, ¡es lo que hace Brillamont único!

Una anécdota muy divertida que les puedo contar es que una vez se me rompió el pantalón en clase. Era mi primer año como maestro y era la última clase del día (creo que un jueves). En el salón vamos terminando la clase y unos alumnos tenían dudas de si todavía bailaba. Les respondí que no, pero podía hacer un salto muy difícil. Me piden una demostración y tras muchos intentos de parte de los alumnos accedo a hacer el salto. Y pues, como se imaginarán, durante el salto, se escucha ese sonido único de tela rompiéndose. La risa de los niños fue tanta que alumnos de las clases de al lado se asomaban para saber lo que estaba pasando y mientras tanto estaba yo muriéndome de la pena con un pantalón roto, jajaja. 😅”

En Brillamont, estamos muy orgullosos de contar con talento como Mr. Diego Sánchez, pues nos hace distinguirnos como un colegio humanista e íntegro.